Ciudad.com estuvo con ellas desde bien tempranito, en la previa camino al ciclo de América, y ambas se mostraron al natural, con mucha energía y súper simpáticas: "Pamela pasa con la 'combi' a buscarnos. ¿Quién te dice 'te paso a buscar a las 7 de la mañana'? ¡Nadie! Ja, ja. Ella me ofreció una vez y ahora ya es casi una cábala", empezó Franzoni.
Ya arriba del auto de Pame, el recorrido de unos diez minutos hasta el canal fue el lapso perfecto para contar la anécdota que marcó el ingreso de la movilera al programa.
Pamela: -Yo la conocía a Naty de cruzarnos en distintos eventos y, a pesar que no voy mucho, da la casualidad que me la encontré varias veces.
Natalia: -No era casualidad, ¡yo tenía un estudio de mercado y la seguía a Pame, ja, ja!
Pamela: -Lo que me llamó siempre la atención era que notaba que tenía todo estudiado sobre el entrevistado y siempre estaba con buena onda y feliz. A mí me pasaba lo contrario con el movilero que teníamos: estaba siempre como cansado, no tenía ganas. Tenía una energía diferente a lo que es Desayuno. Entonces estábamos en el BAAM -justo hace un año- y, de hecho, no estaba nuestro notero. Franzoni me hizo la nota y al ratito me siento y le digo a Daniel "¿sabés, mi amor? Recién una chica me hizo una nota y no sabés lo que es... es divina, amable, estudia, buena onda y adonde voy me la encuentro". ¡Encima le dije "traéme suerte" ese día ¡y me gané una joya que sorteaban!
Natalia: -Ella dijo 'yo me lo voy a ganar'. ¡Cortamos la nota para eso y salió su número!
Pamela: -Y ahí fue que Daniel me dijo "¿por qué no le pedís el teléfono? Si algún día la podés necesitar". No se me había ocurrido a mí y fue Daniel.
Natalia: -¡Y yo no se lo quise dar!
Pamela: -Ja, ja, no te hagas la que no, si se lo diste...
Natalia: -Después de que vos me hiciste la mirada de aprobación. Al toque de eso llamé a toda la familia, "¡ay no saben lo que pasó, Pamela me pidió el teléfono!".
Pamela: -Habrá pasado un mes y, un viernes a la tarde, el notero me dijo que el lunes no iba. La llamé a Naty y ella tenía mucho miedo de arrancar y ser incisiva.
Natalia: -Le decía "yo no puedo".
Pamela: -Me decía "estoy muy agradecida, pero no lo puedo hacer". Fue graciosísimo. Yo le respondí "¿vos me estás jodiendo que dijiste eso en el casting?, vos decí todo que sí y después ves". Yo estaba segura que no me iba a fallar.
El cierre de la anécdota que, se sabe, tuvo final feliz, coincide con la llegada a destino. Y Pamela junto a Natalia y a su maquilladora, Cecilia Castro, se van a preparar para un nuevo Desayuno Americano. Antes, una perlita sobre su look:
Ciudad.com: -¡Estás divina con ese minishort y las botas bucaneras! Además, te veo con el pelo mojado y manteniendo el corte bob: ¿te acostumbraste al corto?
Pamela: -Ja, ja. Sí, aunque ahora un poquito me estoy aburriendo del pelo corto, me lo estoy empezando a dejar crecer, capaz me haga otro corte.
¡Bonus track! No te pierdas el recorrido en el estudio de Desayuno Americano y un poquito más de la intimidad del programa.
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